miércoles, 28 de septiembre de 2016

10 CONSEJOS PARA JOVENES




10 Consejos para Jóvenes Cristianos

Tal vez no hay una época de más cambios y crecimiento que nuestros años jóvenes. Los jóvenes también deben procurar crecer en su madurez espiritual y relación con Dios. Teniendo esta meta en mente, quisiera compartir 10 consejos generales para todo joven.

1. Gózate en la gracia de Cristo.

Antes de pensar sobre cómo vivir, es de primera importancia el recordar la grandeza de la gracia que Cristo ha manifestado en tu vida. Si no te recuerdas del amor que Jesús tiene por ti, se te hará fácil no amar a los demás. Así que antes de pensar en lo que has de hacer para Cristo, piensa en lo que el Hijo de Dios ha hecho por ti (Gá. 2:20). De esta forma la obediencia a Jesús te resultará más fácil y gozosa.

2. Escudriña la Biblia

Cada cristiano —no solo los jóvenes— se debe alimentar de la Palabra de Dios como si fuera un niño hambriento. No digas “amén” a nada que no esté estipulado en las Sagradas Escrituras. No le hagas caso a ninguna voz que se levante contra la revelación del Altísimo. Lee la Biblia de día y de noche. Construye tu vida sobre la roca de la Palabra. Después de todo, Dios honrará a aquellos que honran Su Palabra (1 Sa. 2:30).

3. Ora, ora, ora.

Sintoniza tu corazón para que siempre esté en comunión con el Padre. Incluso cuando no estés en la iglesia ni en tu cuarto, ora al Señor en todo momento. Mientras estás lavando los platos, alaba al Señor. Mientras vas caminado por la calle, glorifica a Dios. Aprovecha cada instante para meditar en Él y dirigir tu alma hacia el único Soberano (1 Te. 5:17).

4. Guarda tu pureza sexual.

Recuerda que eres templo del Espíritu Santo. Tu cuerpo no te pertenece. Como nos dice el precioso Catecismo de Heidelberg: “Yo, con cuerpo y alma, tanto en la vida como en la muerte, no me pertenezco a mí mismo, sino a mi fiel Salvador Jesucristo”. Tus miembros no son tuyos. Tus ojos no son tuyos. Pertenecen a Dios, a Cristo, y al Espíritu. Por lo tanto, aléjate de cualquier cosa que pudiese alejarte de Dios. Guarda tu virginidad para la gloria del Señor para poder entregársela alegremente a tu cónyuge en la noche de tu boda (Heb. 13:4).

5. Usa tus dones para servir en tu iglesia local

Dios te ha dotado de dones y talentos. Por consiguiente, úsalos todos para la gloria de Su nombre. Ya verás cómo Él abrirá puertas para que los pongas por obra. En vez de esperar a que todos te sirvan a ti, toma la iniciativa y empieza a servir a otros en tu iglesia local. Ponte a la disposición del pastor y dile: “Pastor, cuente conmigo para lo que sea. Quiero ser de bendición para mis hermanos y hermanas en la fe”. Ayuda en todo lo que puedas. Aprende a gozarte con los que se gozan y a llorar con los que lloran. Así los hermanos verán el amor de Cristo manifestándose a través de tu vida (Gá. 5:13)

6. Estudia la sana doctrina

Lee libros edificantes. Pasa tiempo con otros hermanos que toman las cosas de Dios con seriedad. Hazles caso. Aprende de ellos. ¿Por qué no comenzar a leer un libro todos juntos y luego comentar sus opiniones al respecto? ¿Algo como Doctrina bíblica de Wayne Grudem o La soberanía de Dios de A.W. Pink u otros autores sanos tales como John Piper, John MacArthur, Paul Washer, R.C. Sproul, Charles Spurgeon, Martyn Lloyd-Jones, Sugel Michelén, Miguel Núñez, etc.? Apasiónate por los cinco pilares de la Reforma protestante: Sola Scriptura, Sola gratia, Sola fide, Solus Christus y Soli Deo gloria. Pide a Dios que selle estas gloriosas verdades en tu espíritu (Tito 2:1).

7. Trabaja como máquina

No seas perezoso. La Biblia nos anima a no ser perezosos, sino imitadores de los que mediante la fe y la paciencia heredan las promesas (Heb. 6:12). ¡Esfuérzate! Sé el mejor trabajador que puedas. Trabaja como José en Egipto y Daniel en Babilonia. Cuando tu jefe te pide que hagas algo, hazlo con todas tus fuerzas. Cuando vas al trabajo, recuerda que tu ética de trabajo es una forma maravillosa de alabar al Señor. Adora al Señor por medio de tu trabajo. Dios se gozará porque estás dando un buen testimonio de Su Hijo. Obedece a tu jefe y haz más de lo que te pide (Mt. 5:41).

8. Sé humilde

Aunque seas más inteligente o tengas más dones o más carisma que otros en tu iglesia local, ¡no te creas! “Porque el que se cree ser algo, no siendo nada, a sí mismo se engaña” (Gá. 6:3). Humíllate. Aprende de los adultos los detalles positivos. Son más sabios, más experimentados y más maduros que tú. No te creas la última Coca Cola del desierto. No eres imprescindible. Dios puede avanzar su Reino sin ti. Pídele al Señor constantemente que te mantenga humilde (Isa. 66:2).

9. Madura pronto

En palabras de Jairo Namnún: “De ser posible, madura tan temprano como puedas. Trabaja tan temprano como puedas, cásate tan temprano como puedas, sirve en tu iglesia tan temprano como puedas. No hay sentido ni propósito en atrasar la adultez o vejez. Ni la adolescencia ni la juventud son excusas para poder vivir nuestras vidas para Dios”. Así que madura pronto. Sé un adulto. Deja de comportarte como un niño. El Señor no quiere que seas el payaso de tu iglesia. Sé sobrio (1 Co. 16:13).

10. Recuerda el evangelio

No olvides que cualquier buen consejo es imposible de seguir sin el poder del evangelio obrando en ti. Recuerda siempre de donde yace tu identidad: no en tus obras, ni en tu estatus, sino en la persona y obra de Jesucristo. Procura siempre conocer a Cristo, y a este crucificado (1 Co 2:2), y deja que el evangelio sea el lente por el cual entiendes las Escrituras, tu ministerio, y tu vida.

martes, 27 de septiembre de 2016

LIBRES EN CRISTO


LIBRES EN CRISTO


REFLEXIÓN DEL DÍA


Jua 8:32  y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres...


La libertad es una necesidad de vida, hemos nacido para ser libres, el habitad de la humanidad es ser libres. Debido a múltiples errores en su vida hoy día muchos han perdido la libertad, no sólo la libertad de expresión sino la libertad de vivir, de caminar de ver a sus familias.


Desde el plano espiritual la libertad es un acto que todos alcanzamos el día que recibimos a Cristo como nuestro único y suficiente salvador, eso indica que al no tenerle, nuestra vida no puede disfrutar de la libertad que Dios ofrece.

Como lograr esa libertad?

  • Conocer a Cristo
El versículo a consideración nos presenta la clave para poder encontrar la libertad, conociendo la verdad que es Cristo la encontraremos.

  • Reconociendo la única verdad
La Escritura afirma que Jesús es el camino, la VERDAD y la vida.

No podemos seguir viviendo atados al 
  • pasado
  • vicios
  • rencores
  • adicciones
cuando sabemos que alguien ya nos dio la oportunidad de poder ser libres, de disfrutar esta vida, de poder dedicar nuestro día a día a Jesús.

Se libre, disfruta, ama, sonríe, gózate porque podemos decir con libertad que somos libres en Cristo..


Gálatas 5:1  

  Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud

GERP 










viernes, 23 de septiembre de 2016

GENERACIÓN SIN LIMITES



GENERACIÓN SIN LIMITES


Las nuevas generaciones están viviendo en una época donde las limitantes sólo están en las  mentes de aquellos que aun no despiertan a la bendición de este tiempo, los avances de la época, están a merce de todo aquel que quiera creerle a Dios, creo que las nuevas generaciones están a las puertas de lo que se pretendan lograr, Dios esta a la expectativa de esta generación donde no hay limites para superar todo obstáculo, el principal propósito del enemigo será limitarte y decirte que habrá un momento determinado donde no vas a seguir y establecerte un limite para ti.

Veamos un ejemplo bíblico de un hombre sin límites  

José nos enseña que las diferentes circunstancias que estaba pasando cuyo propósito de  parte del enemigo seria establecer un limite para su vida y de esta manera no seguir avanzando.

El trabajo en el campo no fue  su limite

Gén 37:2  Esta es la historia de la familia de Jacob: José, siendo de edad de diecisiete años, apacentaba las ovejas con sus hermanos;

Los sueños no fueron su limite

Gén 37:9  Soñó aun otro sueño, y lo contó a sus hermanos, diciendo: He aquí que he soñado otro sueño, y he aquí que el sol y la luna y once estrellas se inclinaban a mí

El pozo no fue su limite

Gén 37:20  Ahora pues, venid, y matémosle y echémosle en una cisterna, y diremos: Alguna mala bestia lo devoró; y veremos qué será de sus sueños.

Gén 37:21  Cuando Rubén oyó esto, lo libró de sus manos, y dijo: No lo matemos.

Gén 37:22  Y les dijo Rubén: No derraméis sangre; echadlo en esta cisterna que está en el desierto, y no pongáis mano en él; por librarlo así de sus manos, para hacerlo volver a su padre.


El desierto no fue su limite

Gén 37:36  Y los madianitas lo vendieron en Egipto a Potifar, oficial de Faraón, capitán de la guardia.

La cárcel no fue su limite

Gén 39:20  Y tomó su amo a José, y lo puso en la cárcel, donde estaban los presos del rey, y estuvo allí en la cárcel.

José se enfrentó con un sin fin de obstáculo que querían limitarlo pero detrás de todos esos obstáculos no hubo límites en su vida, continuo avanzando hasta ser el segundo en el imperio.

Debes de ser sin limites...